jueves, 26 de junio de 2014

Whatsapp, Facebook... y viceversa.


¿Somos predecibles?
Con una "cosa" muy sencilla, se puede saber mucho de nosotros: expuestos al medio, contamos más de lo que deberíamos y callamos lo más importante pero nuestras acciones están ahí, se pueden ver... y analizar. Y los analistas se relamen.



Un día normal, tranquilo, de comida familiar, mi tío comentó una cosa que me pareció bastante interesante; él tenía un pequeña teoría que he podido comprobar con bastante facilidad.

Si, muy bien, pero, ¿cuál es esa teoría?

Sencillo: la gente que usa mucho Whatsapp, usa muy poco Twitter, Facebook y demás redes sociales y, quién controla y actualiza muy seguido Twitter, Facebook, etc., por el contrario, utiliza menos Whatsapp. ¿Fácil, no? + Whatsapp - Facebook y -Whatsapp + Facebook, para hacerlo más sencillo.



Y esto quedó ahí, no se le dieron más vueltas ni se explicó porqué o diferentes teorías que pueden surgir pero yo, en mi fuerito interno, lo pensé: ¿por qué?
En sí, no debería ser así porque las redes social y la mensajería instantánea son compatibles y esta afirmación abarcaba bastante, pero seguía siendo interesante.



Vayamos pues con el experimento:
Seguro que conoces a alguien muy enganchado a Whatsapp, que siempre está con el móvil en la mano hablando con 3 o 4, que está en tropecientos grupos y que presta más atención al móvil que a ti. Entra en su Facebook: ¿cuándo fue la última vez que subió una foto? ¿Cuándo compartió un estado, una foto o respondió a alguien?
Y lo mismo con Twitter.



Por el contrario, seguro que también conoces a alguien en Facebook 23 horas y media, que comparte en Twitter lo que desayuna, lo que caga y cuántas horas duerme de media al día. Esta persona (tan singular), ¿está enganchada a Whatsapp? Me apuesto un riñón y parte del otro que no.


Yo lo comprobé, primero, conmigo: en whatsapp suelo se un fantasma (y en la vida real ja, ja) pero Facebook es una religión. Lo mismo instagram.
Segundo, una amiga: en whatsapp día, tarde y noche, no se despega del móvil ni comiendo (para matarla... a besos). En cambio, en Facebook no existe, solo cambia la foto de perol o le da a "me gusta" a la foto que acabas de subir y que sale ella. Y ya está.

¿Interesante, verdad?

En realidad es una tontería, algo mínimo, pero que debería hablar de nosotros. En un futuro haré un "estudio" sobre lo que dice de nosotros el enganche a Whatsapp o Facebook, puede ser interesante.
Me gusta la palabra interesante.

¿Qué os ha parecido?

Sois adorables, nos vemos en Facebook ;)

No hay comentarios:

Publicar un comentario