viernes, 13 de febrero de 2015

El amor es postureo



Siempre hemos equivocado dos conceptos, los hemos unidos de forma natural. Dos verbos a la vez tan iguales como diferentes: amar y enamorarse.

Pinterest


Amar es dar sin esperar recibir. Amar es encontrar la paz en aquello que amas. Amar es sentirte completo. Amar es satisfactorio, beneficioso; amar es único. Puedes amar todo lo que te haga bien: amar el mar, el aire, amar respirar, amar ese momento,  una sensación, amar la vida.
Amar es fácil, sencillo, sin reparos. Es no esperar a mañana, amar es entregarte con una sonrisa que no esconda nada. Amar una mirada, amar una risa, amar una caricia. Amar es gratuito y no hace mal: amar sana. Todos deberíamos amar "algo", porque eso nos hace humanos.
Ama lo mínimo, lo inusual. Ama al prójimo. Ama a tu amigo y a tu amiga, deshazte de géneros. Amar no depende de razas, edades, colores, prejuicios, sexos, formas, tamaños. Amar es para ti.

Pinterest

Enamorarse es un golpe bajo; es un agujero negro infinito del que nunca encuentras el final con la mirada, sino que te das de bruces con él sin previo aviso y te destroza por completo. Enamorarse es desnudarse sin cuerdas, sin transparencias, sin una mano amiga. Enamorarse es sucio, saca lo peor de nosotros: celos, envidias, paranoias, insomnio, ira, odio. Es la forma más sencilla de pasar un mal rato. Enamorarse duele, es inevitable: es quedarse sin respiración constantemente, sentirse vacío. Es morderte las uñas, llorar desconsoladamente, masajearte las sienes una y otra vez, una y otra vez. Enamorarse son ojos rojos a diario, enamorarse es una bipolaridad contrariada.
Enamorarse es querer algo y no poder tenerlo, es esperar algo que nunca vas a conseguir, es luchar contra los escrito, el destino. Es lanzarte desde 1000 metros sin paracaídas y soñar con que alguien te frene la caída pero adivina: eso es imposible.


Amar es un suspiro con los ojos cerrados.
Enamorarse es un grito ahogado.



Amor el amor, odio enamorarme.

domingo, 4 de enero de 2015

vuelve a casa por Navidad





Curiosa la Navidad.

Tiempo de regresos, de besos y abrazos, de volver a ver caras que hacía tiempo que no veías. Curiosa la Navidad, que agarra el corazón con ternura y lo acaricia para crear esa necesidad de perdón. Perdón innecesario, para "sanar" una herida que uno mismo se creó.

Curiosa la Navidad, saca lo mejor de nosotros. Pero lo malo sigue latente, paciente. Y la primavera hace florecer todo. Todo.

Qué curiosa es la Navidad y cómo atrae a la gente. Es la excusa perfecta. Testosterona, hormonas a flor de piel. Felicidad. Nostalgia.

¿Nostalgia? Tus muertos.




No vuelvas a casa por Navidad, nadie te espera ya. Si decidiste no quedarte, no quieras volver.

martes, 9 de diciembre de 2014

martes, 2 de diciembre de 2014

Sensación de ahogo




Qué perdida me siento,
pese a estar rodeada de gente.
Qué perdida y sola me siento,
aunque sea solo un sentimiento y no una realidad.

Olvidé tu número de teléfono. Desapareciste de mi lista mental.
Qué perdida me siento.

Llámame, sé que está ahí. No puedo verte, pero sé que estás al otro lado.
Me he equivocado, lo siento. Está comunicando.

Llámame, dime 'hola'. Recuérdame que existes.
Miro a mi lado y no estás, ¿cuándo te fuiste?
Desapareciste y dijiste adiós, pero no te escuché. No quise.

Qué perdida me siento, qué grande es todo.
¿Por qué no me ayudas a centrarme? Llámame.

Vuelve.
Estás cerca, lo noto. Pero me he confundido y ya no puedo volver atrás.
Debería darle vergüenza al caprichoso destino que hace que olvide lo importante en mi vida, qué injusto. Pero tú, cariño, no hagas caso.

Lo he vuelto a intentar. ¿Hola? ¿Hay alguien al otro lado?
Silencio. Vacío. Y vuelvo a sentirme perdida.
Porque, aunque lo intente mil veces y lo vuelva a intentar otras mil, ya no puedo dar contigo. Porque he olvidado los rastros que clavé a fuego ardiendo, he olvidado los detalles que hacían de mi vida un mundo, he olvidado las sonrisas más bonitas que he podido presenciar. He olvidado tu apellido, he olvidado el tacto de tu pelo, he olvidado tu sabor y el frío de tus pies en mi cama desnuda. Lo he olvidado todo de ti, he olvidado cómo dar contigo porque ya no sé quién eres.

Tan cerca y a la vez tan lejos.
Y yo sigo perdida aunque tú ya no puedas encontrarme. Porque no se quién eres. Ya no importas.

Ya no puedo ni perderme en mis recuerdos...